Cada 11 de diciembre, desde hace ya 17 años, celebramos el Día Internacional de las Montañas. Este año, el tema propuesto por la ONU para conmemorar este acontecimiento es la biodiversidad de las Montañas. Nos dice la Organización de Naciones Unidas, y quienes practicamos montañismo lo sabemos, que las montañas son unos de los paisajes más espectaculares del mundo y sus ecosistemas son ricos en biodiversidad.
Desde la Federació d’Esports de Muntanya i Escalada de la Comunitat Valenciana (FEMECV) queremos sumarnos este año a esta celebración reivindicando un montañismo más sostenible. Cada pequeño gesto, cada persona que pasea por la montaña, puede con sus actos ayudar a preservar la biodiversidad de nuestro entorno. Está en nuestras manos hacerlo y es nuestra responsabilidad dar ejemplo. Porque si los que amamos las montañas no las cuidamos. ¿Cómo podremos exigir que lo hagan otros?
 
Es por eso que todos tenemos que empezar a incorporar cambios en nuestra vida que se traduzcan en prácticas deportivas más sostenibles. El montañismo, considerado como deporte, tiene más de un siglo de historia en nuestra región, pero esta forma de vida, de contactar con la naturaleza, se remonta a cientos de años atrás. A pesar del cariño y el respeto que los amantes de las montañas sentimos hacia ellas, dejamos una profunda huella que las daña y las enferma.
La crisis sanitaria que atravesamos ha empujado a la gente al aire libre, a las montañas. Que cada vez más personas se aficionen a los deportes de montaña y disfruten de ellos es siempre una buena noticia. El montañismo se ha posicionado como una práctica segura, para disfrutar con amigos o en familia. Pero en los últimos meses se han visto imágenes que echaban por tierra todo este bonito planteamiento. Parajes colapsados, cientos de personas concentradas en una ruta y carreteras repletas de vehículos a motor particulares.
 
En FEMECV creemos que se debe de potenciar la movilidad sostenible y el uso de transporte público o colectivo para acceder a las montañas. La práctica del montañismo debería tener el mínimo impacto en el medio natural y para ello tenemos que poner en marcha medidas restrictivas que limiten el acceso y eviten la masificación.
Las montañas son de todos, pero también son de las generaciones futuras. Es nuestra obligación preservarlas para que puedan continuar disfrutándose en los próximos siglos.
Para cuidarlas y que el acercamiento a estos espacios naturales sea sostenible hay que formarse y actuar con seguridad y responsabilidad. Desde esta tribuna os invito a conocer los más de 400 centros excursionistas y clubes de montaña existentes en toda la Comunitat. Colaborad con ellos, federaos, apuntaos a sus actividades. Es en estas entidades donde encontramos a los verdaderos conocedores de la montaña y también a sus guardianes. Somos los principales interesados en tener unas montañas más sostenibles para que podamos seguir celebrando este día muchos años más.
Y por último, permitidme que os invite a sumaros a la fiesta. El 11 de diciembre es el día para homenajear y celebrar nuestras montañas. No dudéis en compartir vuestras experiencias y vuestro amor por nuestra naturaleza con las etiquetas: #FEMECVMontañasSostenibles y #FEMECVMuntanyesSostenibles.
 
(Artículo de opinión publicado en el diario Levante, el día 11 de diciembre de 2020 ENLACE A LA PUBLICACIÓN).